En un rincón cualquiera del sistema solar....


Había preocupación y malhumor en el ambiente. Lentamente iban llegando los convocados a esta reunión conspirativa en un lugar no precisado del sistema solar. Cuando estuvieron todos, Júpiter, como planeta mayor, les llamo la atención: -Es hora de comenzar. Bueno, todos saben porqué nos hemos autoconvocado y porqué de esta reunión no participa La tierra, así que vamos a ahorrar comentarios e ir directamente al grano.
-Che Gordo, porque no das tu opinión y discutimos sobre eso – propuso confianzudo Venus, sentado atrás de Saturno y haciendo esfuerzos para no ser golpeado con sus anillos cuando este se volteaba para ver quien hablaba.
-Si están de acuerdo comienzo – dijo Júpiter repasando unas hojas de papel que tenia en sus manos – Hasta aquí veníamos bien, con un sistema solar donde cada uno tenia su estatus, se respetaba el orden y la antigüedad, bien delimitadas las jerarquías y así hemos pasado millones de años. Los problemas empezaron hace poco cuando en La tierra aparecieron esos seres que se creen que son los dueños y señores del universo y empezaron con sus clasificaciones absurdas. Y ahora, pretenden mezclar todo….
-Sí, no podemos tolerar que se pretenda equipararnos con peñascos que ni atmósfera tienen e inclusive con nuestros propios satélites, contra los que no tengo nada pero que evidentemente son nuestros subordinados – dijo Mercurio, habitualmente caliente, pero ahora mucho más y mirando fijamente a Caronte, el satélite de Plutón, que tenia una extraña sonrisita sobradora.
- ¿Qué me miran? ¡Yo no dije nada! – se atajó Caronte – ¡Yo hago lo que Plutón diga y no tengo nada que ver con que los de la tierra me quieran ascender de categoría!
Alentado por la enjundia con que se había defendido su satélite, Plutón, que se había ubicado al fondo, dijo tímidamente – Bueno, espero que me defiendan, porque me quieren sacar el estatus de planeta y ponerme a la altura de Ceres que es un miserable asteroide y si nos descuidamos van a terminar reconociendo a Pallas y Vesta….
-¿Quienes son esos? – preguntó Urano que estaba distraído y totalmente en bolas.
-¡Yo no voy a aceptar semejante atropello y falta de respeto, ni lo sueñen, antes que eso me voy a mandar un paro de orbita! – amenazó Marte desplegando una pancarta que decía: “Boicot a la reclasificación planetaria de los cráneos terráqueos”.
-Para colmo quieren agregar a Xena, que vive al borde del sistema, ¡ni se sabe si pertenece o no! – grito Saturno moviéndose enérgicamente y golpeando reiteradas veces con sus anillos al planeta rojo que hacia contorsiones para tratar de esquivarlo.
-¿Quien lo juna a Xena? – gritaron varios, levantando la temperatura de la reunión que se estaba descontrolando.
-¡Orden! ¡Orden! ¡No se puede seguir así! ¡Tengo que seguir informando y después tenemos que decidir que hacemos! – vocifero Júpiter agitando los papeles que tenia en su mano- Atiendan – y prosiguió- Según nuestros informantes….-se hizo un silencio y todos se dieron vuelta para mirar a La Luna que estaba radiante y trataba de defenderse del acoso de Urano que seguía sin darle pelota a la reunión -Como decía…según nuestros informantes, todo se trata de un fabuloso negocio, uno mas a los que los humanos de La Tierra nos tienen acostumbrados. Todos estos cambios harán necesarios hacer nuevos mapas celestiales, cambiar los libros de geografía, de astronomía, de física, de astrología. Los maestros y profesores deberán acudir a hacer cursos de actualización. Se gastaran millones en estos cambios, beneficiando a las editoriales, a las academias, a los dueños de portales de Internet, a los fabricantes de mapas y probablemente hasta hagan merchandises con los nuevos planetas que van a pasar a ser estrellas, se imaginan…llaveros, pisapapeles, pines, remeras estampadas con la leyenda “I love Xena” o “Ceres corazón”, en fin creo que esta todo claro. ¡La ambición humana no tiene límites! ¡No respetan ni siquiera el orden natural! ¡Todo sirve para hacer negocios! y en esta carrera señores esperemos nuevos cambios…
Se hizo un silencio. Júpiter miraba a cada uno y hacia señas con la cabeza invitando a todos a emitir su opinión. La desazón había reemplazado a la indignación inicial.
-Bueno….de todas maneras todavía se tienen que reunir para ver si se ponen de acuerdo, he sentido que no todos coinciden – arriesgó Mercurio
-Si, podríamos hacer un cuarto intermedio y esperar, antes de tomar una medida drástica - dijo Saturno ya mas calmado
-¡Yo propongo que no le demos bola a esos de La Tierra!, ¿quienes son? – gritó Urano despreocupado – Todos se dieron vuelta y lo miraron.
-¡Tiene razón! ¡Que nos clasifiquen como quieran! ¡Nosotros sabemos lo que somos! – gritaron al unísono planetas y satélites-
-¡Viva el orden natural! – se oyó con claridad.
-¡Vámonos gordo! – ordenó Saturno con autoridad – ¡la próxima vez nos juntamos para una festichola!
-Pero cambiemos de lugar, a nosotros nos queda muy lejos - dijo Neptuno que no había hablado en toda la reunión, guiñándole un ojo a Plutón.
-Bien señores, queda levantada la sesión hasta nuevo aviso- y ordenando los papeles Jupiter, comenzó a despedir solemnemente uno a uno a todos los astros que emprendieron el regreso a sus lugares de origen para seguir orbitando alrededor del sol, tarea suspendida en atención a la gravedad de los acontecimientos que los convocaron apresuradamente.


Gringotilo

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Para romper el hielo....

El color de Roma

Filosofía barata en la plaza San Martín